Conmigo (feat. Titó)

Hoy somos yo y mi complejo de atleta.
Me estoy volviendo sano,
ahora voy a por tabaco en bicicleta.
Sigo sin vestir de piel ni etiqueta,
porque seguir de pie aquí es mi único papel, que yo sepa.
Ya no me asusta verme día a día
dando saltos de alegría encima de mi propia tumba.
Cargando con la culpa de tener a la mejor de mis sonrisas
afrontando la peor de las angustias.
Antes de caminar sobre cristales
tuve que aprender a no mirarme los pies.
Fui capaz de usar como espejo los ojos de un ciego
y al ver reflejado en ellos lo que no quiero ser, pensé:
¿Qué será de mí el día que faltes tú, eh?"
Lo que sería de la sombra sin luz...
Sólo al morir se irá el miedo a morir
y el final feliz será ver que los tuyos aceptan vivir sin ti.
El tumor de su buen humor,
aquello que nos enseñó a reír de dolor,
a llorar por amor,
a escondernos tras el sí por miedo al no
y a obligar a la conciencia a ser casera del error.
Yo con Dios ya no me hablo,
por más que grite su nombre a pulmón
segundos antes de cada orgasmo;
y entiendo que mi voz no le haga mirar hacia abajo
pero a los que se llevó que me haga el favor de cuidarlos.
¿Qué será de mí el día que faltes tú?
(Lo que sería de la sombra sin luz)
¿Qué será de mí el día que faltes tú?
(Lo que sería de la sombra sin luz)
¿Cuántas veces quise ser una orden de acercamiento
viendo los enfrentamientos de la razón con el temperamento?
¿Qué será de mí el día que faltes tú?
(Lo que sería de la sombra sin luz)
Aquellas manchas en el pantalón:
el fruto de la unión entre el recuerdo y la imaginación.
Las veces que perdí el control
y las que me hice con él por más que me costó...
Si no me dejan ser normal,
seré cuatro paredes, veinte rejas
y un boquete con vistas al mal.
Por dar de lo que recibí sin pedir y tal
con afán de impedir y delimitar.
Me he vuelto una persona pesimista y resentida
que se siente más sabia cuanto más olvida.
Otros dirán que, a la hora de la verdad,
no hay mentira puntual, pero es mentira.
Y el que mis defectos especiales ve carencia de argumento
es que no sabe del placer de lo incorrecto.
Enloquecer no es más que un acto de cordura.
A veces para abrir la mente hay que cerrar la cerradura.
Ya salté al vacío
por suerte mi cuerpo no cabía en mi bolsillo.
Muchos de mis amigos daban ya por hecho mi retiro
y con la tierra que pusieron de por medio me labré un camino.
Cuando sueñas con serpientes la traición está en el aire.
Y prefiero despertarme solo que no despertarme.
¿Qué será de mí el día que faltes tú?
(Lo que sería de la sombra sin luz)
¿Qué será de mí el día que faltes tú?
(Lo que sería de la sombra sin luz)
¿Cuántas veces quise ser una orden de acercamiento
viendo los enfrentamientos de la razón y con el temperamento?
¿Qué será de mí el día que faltes tú?
(Lo que sería de la sombra sin luz)