Negro

Negro.
Nací en la tierra del maíz, bajo un cielo gris de enero y borracho, triste y cantando mira igual que José Alfredo.
Debo.
Redireccionar todas mis rutas o beberme esta cicuta para saldar lo que debo.

Ya no zebro.
Sólo sé que sin el rap me quiebro y que prefiero cien veces aullar a convertirme en ciervo.

Hoy despierto.
Atento a cada movimiento externo.
Con lo interno hecho pedazos y un tesoro en el cuaderno.
Los cuernos afilados a kilometros del cielo
apretando los dos puños con la impotencia de un preso.
Con el ego hecho de yeso y el talento de adamantium.

Por eso es que aún miro al suelo aunque haga arder escenario.
Porque yo nunca escribí para que me pidieran fotos.
Ni para firmar los glúteos de una princesa de botox.
Yo escribí, por mí, por ti, por él por ella, por nosotros.
Porque todos somos UNO y uno sólo es algo roto.

Negro, es un agujero negro
un viaje a lo posible, a lo seguro y al recuerdo.
ne ne Negro, es un agujero negro
un intrascendental, espíritu, cuerpo y cerebro.

Tengo una herida de más de dos mil trscientos años en mí conciencia.
Conozco el origen del final y viceversa.
Voy con el alma rota, la poesía como férula.
Y el odio infectando hasta la última de mis células.

Salí del coma, entré en el punto y aparte.
Con hambre de desastre y repulsión por la personas.
Escribiendo otro verso, bebiendome otro trago.
Cansado del sexo con mujeres que no amo.

El mundo es un hospital y un enfermo con doctorado.
La sociedad no es nada más que un maldito cuarto acolchado.
Tengo los ojos cerrados, sólo así puedo ver todo.
Cuando sepan que es el hambre no hayarán brillo en el oro.

Soy un patriota del cosmos, orgulloso de ello
enfermo.
Terminal de humanidad con la mierda hasta el cuello.
Necesito una inyección de esperanza con urgencia.
Antes que el corazón se me quiebre por anemia.

Negro, es un agujero negro
un viaje a lo posible, a lo seguro y al recuerdo
ne ne Negro, es un agujero negro
un intrascendental, espíritu, cuerpo y cerebro