Capricornio

Un indicio, un dolor en el estómago
Palabras que se atoran cuando llegan al esófago.
¿Cómo sacarlas? No quieren venir a jugar
Son palabras con resaca solo quieren fumar

Y yo buscando un lugar para ponerle un hogar
A este poema que no piensa ni es su propio bienestar.
No hay amor, no hay mar, no hay agua ni sal
Esta cuidad está vacía somos tal para cual.

Ayer me acosté en tu hombro y no era para llorar,
Se me salieron las lagrimas de tanto pensar.
Capricornio, por los cuernos de carnero
Y porque nací en enero, perro, siempre fui el primero

Desde que empecé de cero traigo la vista en los cerros
Y aunque a veces la he bajado a sido para ponerme serio.
Pase por el cementerio,
Me puse sentimental pero ya ni así miro al suelo

He cambiado como una tarde de verano,
Como tantos juramentos que nos hicimos en vano.
Como un mimo despintado estoy gritando en el estrado
Que por una causa justa ni matar es un pecado

Aunque cambié de mapa no he cambiado de plan
Sigo en la misma etapa de escribir y fumar.
Solo tengo dos capas; "O estoy bien o estoy mal"
Y hoy estoy mejor que nunca porque todo me da igual

Capricornio, ni tal hombre ni tan demonio
El producto de sucesos de este plano transitorio
Ni tanto amor ni tanto odio
Equilibrio espiritual para afrontar cada episodio

Capricornio, ni tal hombre ni tan demonio;
El producto de sucesos de este plano transitorio
Ni tanto amor ni tanto odio
Equilibrio espiritual para afrontar cada episodio

Nací el 9 del mes primero, hijo del desorden
Enriqueciendo mi mente en medio de un barrio pobre.
Sin libros en mi casa, mi visión era estrecha
Pero siempre tuve claro hacia donde apuntar la flecha.

Hoy he leído bastante, he vivido el doble
Y he escrito mucho más que lo que casi cualquier hombre.
Antes vivía dormido pero conocía el arte
Y ahora sueño despierto, ya ni tu "DIOS" va a pararme.

He amado como NADIE, he odiado como TODOS
Y casi olvido que olvidar es acordarse de uno mismo.
Te requería como al aire y aunque casi mi ahogo
Al final encontré el modo de respirar a mi ritmo.

La rutina envenena, también el aprendizaje
La felicidad funciona con el más raro engranaje.
Estoy cansado de "aquí" pero sin fuerzas para un viaje,
Por suerte me tengo a "mí" y a mi interior como paisaje

La verdadera riqueza de este mundo esta escondida
En las personas que amas como para dar la vida.
Y yo por ti la hubiera dado, pues ya eras de mi SANGRE
Pero tuviste de SANTA lo que yo de gobernable

Y un golpe no duele menos si lo respondes más fuerte,
Mas poner la otra mejilla se lo dejó a los creyentes.
Mi gente no sabe perder, por eso ganamos siempre
De este lado brindamos hasta por la mala suerte

Capricornio, ni tal hombre ni tan demonio;
El producto de sucesos de este plano transitorio.
Ni tanto amor ni tanto odio;
Equilibrio espiritual para afrontar cada episodio

Capricornio, ni tal hombre ni tan demonio;
El producto de sucesos de este plano transitorio.
Ni tanto amor ni tanto odio;
Equilibrio espiritual para afrontar cada episodio