Manifiesto

No hay mucho que decir yo solo vine a compartir que
Las siguientes líneas no podrán redefinirme
Y aquello que hice solo fue por advertirles que todos los míos traen sus balas con sus rifles
Que estamos dispuestos a morirnos pa decirles
Llegamos hasta aquí, ahora conocen nuestro límite

Si esta es la tragedia, pues será que soy Eurípides
Sé que no les gusta que me comunique en símiles
Rey de pecado coronado sin una molestia
Acabo de firmar mi nombre en el libro La Bestia
Y soy adicto a los poderes sin tener modestia
Un enfermito voladito contra la inconsciencia

Irregulado, sacando fuerzas del pasado
No puedo tener competencia en lo que yo he creado
Y si se ponen brutos, rápido se van carajo
Soy un vampiro, malicioso, que es inmune al ajo

Y no me creen cuando lo digo, ese es el relajo
Mi katana tiene dos filos pa hacer doble tajo
Siempre limadita, si presionas se te va hasta bajo

Bien aplicadito con la rima porque siempre rajo
Lo aprendí de Gat, que en paz descanse y que no sea en vano
Es que los grandes se nos van demasiado temprano
Y a los artistas, pues tú sabes, se nos va la mano

Si no hacemos lo que queremos al final colgamos
Más por los míos sigo haciendo lo que me propuse
Yo solo soy un mecanismo pa que ellos me usen
Tenía listo esto antes pero lo pospuse
Pegar o ser siempre genuino, vivo en ese cruce

Llego la hora pa que el abusado sea el que abuse
Decidiremos al final como el poder se use
Están tirando, sé que quieren que los estortuse
Buscándome las ganas donde último las puse

Tengo cara de huele bicho siempre estoy parando ceja
Yo soy el supervisor, no tengo tiempo pa tus quejas
Solo hay tiempo pa mis metas, dime tú si alguien me reta
Que vivo en mi cabeza y tengo mi propio planeta

Entonces solo llama si quieres que te lo meta
Te veo hablando guey, pero no llegas a la neta
Y no me ladres, que sabes que yo te llamo a Peta
Aquí se respeta y si no, sabes que se te espeta

Soy come mierda con mi vino y con mi queso feta
Nada barato porque no me gustan las jaquecas
Siempre a frambuesa, nunca poni, siempre potra, reza
Que si me cruzo en tu camino no te salvas de esa
No digas nada, solo ampárate a la quinta enmienda
Y ahora sí cayó la piedra puñeta