En Vos Confío

Sueño vudú una serpiente
Fotografías la santa muerte
Un alfiler atado de un cigarro
Pa' tener mi sangre y pa' chingar a veinte

Si voy contra todos así lo quieres
Por ti mis labores y mis deberes
Me curas de espanto y aquí me tienes
Por buscarte tanto y pa' saberte a veces

Y que no te vayas, y cuando lo intentes
Lo pienses dos veces por si te arrepientes
Y que no me faltes, y que no me tientes
Y te encuentres cerca cuándo esté caliente

Que el enemigo llegue de frente
Que ataca de espaldas la pinche gente
Te muerden la mano, también te mienten
Pero tú me cubres, me proteges siempre

Y que las balas que me tiran no me puedan alcanzar
Que las navajas no me hieran ni me logren encontrar
Que la lengua que maldice mi nombre se calle ya
Que se muerda y pierda el rastro el que se arrastre en vez de andar

El mal testigo, el falso amigo
Me piensan sólo, y yo estoy conmigo
Quieren perderme y dejarme jodido
No saben que tú eres todo lo que sigo

A ti mi entrega, por ti resisto
El odio omega el amor infinito
Es justo el juez y él ha de juzgarme
Y volveré a buscarte para estar contigo

Y que no te vayas, y cuando lo intentes
Lo pienses dos veces por si te arrepientes
Y que no me faltes, y que no me tientes
Y te encuentres cerca cuándo esté caliente

Que el enemigo llegue de frente
Que ataca de espaldas la pinche gente
Te muerden la mano, también te mienten
Pero tú me cubres, me proteges siempre

Lo dicen si estoy ausente, pero todo escucho porque el todo es mente
Con indirectas y a mis espaldas
Porque no se atreven cuando estoy enfrente
Y sé que pasa a la izquierda siempre y verás en vilo mis desafíos
Y también mis enfrentamientos se
Que estoy a salvo porque en vos confío

Y si sonrío
Los pensamientos míos
Son mi mayor tesoro
Y si es que lloro no es vanidad mi llanto sirve para mis coros

Que la trinidad de mi cuerpo sepa
Que tiene voluntad y que requiere de fuerza
Que lo que vemos sólido son sólo frecuencias
Y me diste vida para darme cuenta

Y que las balas que me tiran no me puedan alcanzar
Que las navajas no me hieran ni me logren encontrar
Que la lengua que maldice mi nombre se calle ya
Que se muerda y pierda el rastro el que se arrastre en vez de andar

Y que no te vayas, y cuando lo intentes
Lo pienses dos veces por si te arrepientes
Y que no me faltes, y que no me tientes
Y te encuentres cerca cuándo esté caliente

Que el enemigo llegue de frente
Que ataca de espaldas la pinche gente
Te muerden la mano, también te mienten
Pero tú me cubres, me proteges siempre