Los Viejos Olvidados
Hoy quiero hablar con vos, cachorro mío
Apretando tus manos que se agrandan
Las mariposas de tus ojos me preguntan
Y en el andén del corazón busco palabras
Siempre fuimos los dos tan coincidentes
Que el lenguaje de tu alma y de la mía
Nos sorprendió en siestas de soles
Sembrando sueños
Y recogiendo del cordel, mil fantasías
Hoy estuve de paso con mis versos
En una casa sin el ruido de vajillas
Sin el llanto de un niño
Sin la risa de un niño
Donde se pone a la vejez o se la archiva
Si vieras, hijo, qué tristeza de fragancia
El perfume del jazmín y la arvejilla
Cuántos ojos jubilados me han mecido
Cuánta ausencia del nieto en las rodillas
Quiero decirte, hijo, que no caigas
Jamás en mezquindades tan marcadas
Que los abuelos olvidados se nos quedan
Prendidos de la mano de la infancia
Y si algún día molesto tus urgencias
Y no razono más o estoy cansado
Tenme paciencia, hijo, no me dejes
En un archivo de recuerdos, olvidado
Hoy estuve de paso con mis versos
En una casa sin el ruido de vajillas
Sin el llanto de un niño
Sin la risa de un niño
Donde se pone a la vejez o se la archiva
Si vieras, hijo, qué tristeza de fragancia
El perfume del jazmín y la arvejilla
Cuántos ojos jubilados me han mecido
Cuánta ausencia del nieto en las rodillas
Apretando tus manos que se agrandan
Las mariposas de tus ojos me preguntan
Y en el andén del corazón busco palabras
Siempre fuimos los dos tan coincidentes
Que el lenguaje de tu alma y de la mía
Nos sorprendió en siestas de soles
Sembrando sueños
Y recogiendo del cordel, mil fantasías
Hoy estuve de paso con mis versos
En una casa sin el ruido de vajillas
Sin el llanto de un niño
Sin la risa de un niño
Donde se pone a la vejez o se la archiva
Si vieras, hijo, qué tristeza de fragancia
El perfume del jazmín y la arvejilla
Cuántos ojos jubilados me han mecido
Cuánta ausencia del nieto en las rodillas
Quiero decirte, hijo, que no caigas
Jamás en mezquindades tan marcadas
Que los abuelos olvidados se nos quedan
Prendidos de la mano de la infancia
Y si algún día molesto tus urgencias
Y no razono más o estoy cansado
Tenme paciencia, hijo, no me dejes
En un archivo de recuerdos, olvidado
Hoy estuve de paso con mis versos
En una casa sin el ruido de vajillas
Sin el llanto de un niño
Sin la risa de un niño
Donde se pone a la vejez o se la archiva
Si vieras, hijo, qué tristeza de fragancia
El perfume del jazmín y la arvejilla
Cuántos ojos jubilados me han mecido
Cuánta ausencia del nieto en las rodillas
Credits
Writer(s): Mabel Francisca Quercia
Lyrics powered by www.musixmatch.com
Link
© 2024 All rights reserved. Rockol.com S.r.l. Website image policy
Rockol
- Rockol only uses images and photos made available for promotional purposes (“for press use”) by record companies, artist managements and p.r. agencies.
- Said images are used to exert a right to report and a finality of the criticism, in a degraded mode compliant to copyright laws, and exclusively inclosed in our own informative content.
- Only non-exclusive images addressed to newspaper use and, in general, copyright-free are accepted.
- Live photos are published when licensed by photographers whose copyright is quoted.
- Rockol is available to pay the right holder a fair fee should a published image’s author be unknown at the time of publishing.
Feedback
Please immediately report the presence of images possibly not compliant with the above cases so as to quickly verify an improper use: where confirmed, we would immediately proceed to their removal.