El cielo puede esperar

Morir por un secreto el desenfreno de un momento
La expresión del silencio en el placer de un beso
Lágrimas de acuarela de aquellos sueños rotos
Un desliz de tu mirada en el brillo de tus ojos

Con mis manos sostendré la nieve derretida
Que se escapa como aliento de mi vida
No puedo recoger los ecos de tu risa
Convirtiendo mi habitación en una triste guarida

Dime que volverás
Que no me vas a fallar
Que el cielo me pase a buscar
Miro a través del cristal
Que mi rostro ha vuelto a empañar
Llorando porque te vas

Con mis manos sostendré la nieve derretida
Que se escapa como aliento de mi vida
No puedo recoger los ecos de tu risa
Convirtiendo mi habitación en una triste guarida

Viviendo entre tinieblas una sombra de mis sueños
Sigue oculta en su misterio
Aunque arde como el fuego
Buscando la respuesta
Que quizás no llegue a tiempo
Se cerraran mis ojos en este mundo ciego

Con mis manos sostendré la nieve derretida