Mas allá de los sueños

Un alma polvorienta
Atrapado en éste cuerpo
Voy pisando veintiséis
Y ya siento cien inviernos
Mi energía se drena
Y no logro sentir pena
Cómo Jesús en la última cena
Presiento problemas
Y no corro, ni me escondo
Mucho menos toco fondo
En un mundo moribundo
Este vagabundo vio todo
Una madre amamantando
Con odio a su cría
Tristezas y dolencias
Entre caricias muy tibias
Ni me interesa
Lo que depare el destino
Sus huellas va dejando
En el sendero éste canino
Una mirada gris
Porque nada me atormenta
Como filme Mexicano
De los años cincuenta
Encuentra
Aquello que a mi me inspire
Que saque mis temores
Mas profundos para que rimen
Que hizo que decidiera
Que al fín rompiera ese himen
Que me trajo al abismo
Dónde no cualquiera resiste
Existe en mi mente una crisis
Y éste terrible capullo
No buscó metamorfosis
Caí en el pecado
Y nunca me levanté
El rojo de tu entrepierna
Fue cereza en el pastel
Y aquél día
Hubo un enorme cambio
La luz ya no la erradio
Ya ni me emociona el radio
No quiero llenos estadios
Ni me importan los horarios
Todo quedó claro cuando
No me dió fe el rosario

Una vez más
En éste desierto árido
Dónde no escucho nada
Más que mis pálpitos
Los enormes grilletes
Atados a mis tobillos
Me impiden avanzar
En mi largo recorrido
Vaya viacrucis
Ni siquiera veo el fin
Ni siquiera el inicio
Y ni como llegue aquí
A lo lejos distingo
Una salida inteligente
Al igual que el amor
Son jugarretas de mi mente
Me detengo a reposar
Y me topo un arroyo
Es de color ámbar
Con corrientes muy rápidas
Parece ser cerveza
Es producto de mis ojos
Ya que sin saber
Saboreaba mis lágrimas
Ese sabor salado
Me puso a recordar
Uno de los fuertes sucesos
Que me tienen acá
Esa hermosa dama
Piel de plata ojos de bronce
Quedé en una soledad
Que abarca mil y una noches
Mi cuerpo deteriorado
Me miro tras de escena
Como un bufón rendido
Con plata en la cabellera
Mi musa inspiración
Mi amada traicionera
Acabé con zapatos de concreto
En mi mar de letras
Termino agitado las
Pupilas dilatadas
Agotado y rendido
No hay nada mas que dar
Fin de la función
Ya no me queda nada
Y me abraza de nuevo
La maldita realidad