Amor romántico

Conocí a una chavala, la primera vez que la vi,
Supe que era mi alma gemela, y que estaba hecha para mí.
La seguí hasta su casa, a escondidas como un Don Juan,
Para darle una sorpresita y plantarme allí en su portal.
En verdad nunca habíamos hablado,
Pero yo sabía que le gustaba porque en el tren me había mirado.

Que no soy un enfermo, soy un romántico,
Y le cantaba cosas a su ventana (clavelitos),
Pero para probarme me rechazaba,
Y en el fondo sabía que me quería, porque si a mí me gustaba,
Po no me entraba en la cabeza que no le gustara yo.

Y mi padre me dijo: "hijo no pierdas la constancia,
No te des nunca por vencido, sigue y no pierdas la esperanza".
Le hice treinta canciones, le mandaba quinientos whatsapps,
Pero ella se hacía la dura, para que yo me lo currara.
Fíjate si se hacía la dura, que hasta me denunció por acoso,
Tenía que lanzarme, me lo estaba pidiendo a gritos.

Que no soy un enfermo, soy un romántico,
Y en el barrio todo el mundo me animaba:
"Ve a por ella, Romeo".
Ella dijo a sus padres que tenía miedo,
Y hasta ellos le dijeron que exageraba,
Todos estaban de acuerdo en que la loca era ella
Y que el bueno era yo.

Esto que te he contado, no se aleja de la verdad,
No es algo tan descabellado y en la cultura presente está,
Y si te acosan jódete,
Que la culpa es tuya.
A no ser que seas hombre blanco y cis-heterosexual.