Ciudades Dormidas

Se alejaron monte adentro de la huerta familiar
Para irse de la Edad Media, al Río de la Plata, por mar
Solo los días de lluvia a la escuela podían ir
Huyendo de la intemperie aprendieron a escribir

Cantando una vez más
Algún himno parroquial
Naciendo al partir

Guardaron sus apellidos en valijas de ultramar
Cargando en sus propios nombres toda la guerra y la paz
Quién les ha dado esa idea, lloraron sin protestar
Los más viejos de la aldea, a punto de extrañar

A aquellos que aún no se van
Pero que algún día lo harán
Si el mundo no llega hasta aquí

Se van a sembrar hijos del mar
En las ciudades dormidas
Y respirar otro lugar
Sin perder de vista la orilla

Colonizaron San Telmo, trabajando de peón
Y barriendo, en la vereda, sueños de otros sin patrón
El viento mezcló dialectos en la esquina de algún bar
Nacieron esos recuerdos que ayudaron a olvidar

Cantando una vez más
Algún tango de arrabal
Naciendo al partir

No somos más que la tempestad
Que los dejó en esta orilla
Hijos del mar y la guerra en paz
Que vive en la suerte escondida

¡Zarpa ya!