La Novia Ausente
La princesa está triste
¿Qué tendrá la princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa
Que ha perdido la risa, que ha perdido el color
La princesa está pálida en su silla de oro
Está mudo el teclado de su clave sonoro, y
Y en un vaso, olvidada
Se desmaya una flor
A veces repaso mis horas aquellas cuando
Era estudiante y tú eras la amada
Que con tus sonrisas repartías estrellas
A los puntos altos de aquella barriada
¡Ja-jay! las noches tibias, ¡ah!
La fantasía de nuestra veintena de abriles felices
Cuando solamente tu risa se oía, y
Y yo no tenía mis cabellos grises
Íbamos del brazo y tú suspirabas
Porque muy cerquita te decía: "mi bien
¿Ves cómo la luna se enreda en los pinos, y
Y su luz de plata nos besa en la sien?"
Al raro conjuro de noche y reseda
Temblaban las hojas del parque, también
Y tú me pedías que te recitara
Esa sonatina que soñó Rubén
¿Qué duendes lograron lo que ya no existe?
¿Qué mano huesuda fue hilando mis males?, y
Y qué pena altiva hoy me ha hecho tan triste
Triste, como el eco de las catedrales
¡Ah!, ya sé, ya sé
Es la novia ausente, je
Aquella que cuando estudiante me amaba
Que al morir, un beso me dejó en la frente
Porque estaba fría, porque me dejaba
Íbamos del brazo y tú suspirabas
Porque muy cerquita te decía: "mi bien
¿Ves cómo la luna se enreda en los pinos
Y su luz de plata nos besa en la sien?"
Al raro conjuro de noche y reseda
Temblaban las hojas del parque, también
Y tú me pedías que te recitara
Esa sonatina que soñó Rubén
¿Qué tendrá la princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa
Que ha perdido la risa, que ha perdido el color
La princesa está pálida en su silla de oro
Está mudo el teclado de su clave sonoro, y
Y en un vaso, olvidada
Se desmaya una flor
A veces repaso mis horas aquellas cuando
Era estudiante y tú eras la amada
Que con tus sonrisas repartías estrellas
A los puntos altos de aquella barriada
¡Ja-jay! las noches tibias, ¡ah!
La fantasía de nuestra veintena de abriles felices
Cuando solamente tu risa se oía, y
Y yo no tenía mis cabellos grises
Íbamos del brazo y tú suspirabas
Porque muy cerquita te decía: "mi bien
¿Ves cómo la luna se enreda en los pinos, y
Y su luz de plata nos besa en la sien?"
Al raro conjuro de noche y reseda
Temblaban las hojas del parque, también
Y tú me pedías que te recitara
Esa sonatina que soñó Rubén
¿Qué duendes lograron lo que ya no existe?
¿Qué mano huesuda fue hilando mis males?, y
Y qué pena altiva hoy me ha hecho tan triste
Triste, como el eco de las catedrales
¡Ah!, ya sé, ya sé
Es la novia ausente, je
Aquella que cuando estudiante me amaba
Que al morir, un beso me dejó en la frente
Porque estaba fría, porque me dejaba
Íbamos del brazo y tú suspirabas
Porque muy cerquita te decía: "mi bien
¿Ves cómo la luna se enreda en los pinos
Y su luz de plata nos besa en la sien?"
Al raro conjuro de noche y reseda
Temblaban las hojas del parque, también
Y tú me pedías que te recitara
Esa sonatina que soñó Rubén
Credits
Writer(s): Enrique Domingo Cadicamo, Guillermo Desiderio Barbieri
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