Había una Vez

Había una vez una bruja buena
Que siempre salía en noches de luna llena
Su nombre es Morgana y siempre ayudaba
A cuanto vecino lo necesitara
De pequeña soñó con hacer el bien
Sin mirar a quien, usando su don
Con magia curaba, sanaba y reparaba
No había herida que se le escapara
Mas los vecinos, que desconfiaban
La maltrataban, con miedo la miraban
¿Cómo una mujer con tanto talento
Y conocimiento nos puede proteger?
¡Que arda en la hoguera!, decía el cura
Que quemaba herejes con toda premura
¡Mejor el destierro!, decía el alcalde
Que sin duda alguna era otro culpable
Morgana huyó, corría y corría
Se adentró en el bosque a ver si se perdía
No entiendo por qué, si no hice nada
Pensaba la pobre mientras sollozaba
De repente una voz desde la oscuridad
Le empezó a preguntar ¿qué te hace llorar?
Condenada estoy, y, aunque intento ayudar
No consigo encontrar cual es mi lugar
Un gato salió y le contestó
Conmigo ven, tengo la solución
Los incomprendidos y los renegados
Vivimos mejor lejos de amargados
Morgana accedió y ahora vive feliz
Rodeada de brujas, vampiros y lobos
Y si alguna vez la ves por ahí
Trátala bien y cuidará de ti