El Pecado de Dios

Desnuda Lilith se baña en el río
Y el mismísimo Dios bendito sea el santo la ve
Deslumbrado no puede contenerse
Y presa de amor en ella peca
Según los escritos apócrifos
De ciertos cabalistas anónimos
Las desgracias del mundo son obra del pecado de Dios
Lilith era la mujer de Adán
Arrastrando las heridas de su carne
Adán tomó una concubina de nombre Eva
Para que él no volviera a ver a Lilith
Dios los echó de su casa

Ella me mira yo intento hablarle de belleza y balbuceo
Casi en susurros leemos juntos a Primo Levi
No tenemos más de veinte años
Una bocina suena no es el shofar
En la esquina cubierta de espinos y de barro
Está la camioneta de su novio
Ella sale apurada no vuelvo a verla nunca
Y si el amor fuera eso?
Una mujer desnuda que hace pecar a dios
El prodigio negado la desgracia del mundo
Un pozo en el camino que nos saca de casa
Y la ira de los incautos que caen en él
Congoja embellecida al paso de los años
Por un balbuceo inconcluso
Por la recitación conjunta de sus súplicas
O por esta única mirada que regresa y regresa
Como el eco de un shofar impostergable
Llamando a su adoración
Según los escritos canónicos de ciertos cabalistas insignes
Quien no siente en su carne la complejidad
De un alma que desea no vive
Dios no cuenta palabras en el cuerpo de los devotos
Cuenta memorias heridas sangre

Vestida con sus mejores ropas
Lilith se mira en la placidez del río
Y el Mismísimo Dios Bendito Sea el Santo
Que alguna vez la ha visto
Vuelve a evocar su rostro
Deslumbrado no puede contenerse
Y envanecido por la fascinación
De recordarla vuelve a pecar
Ahora de orgullo