Ella (con Iza)

Camina suave
Con una llave colgando de su cuello
Poco lapiz labial, una liga en el cabello
Bello destello en cada ojo
Vestido rojo, aretes circulares
Par de lunares a la vista
Reina de la pista, ríe
Por dentro llora
Tiene corazón pero nunca se enamora
No bebe pero fuma, locomotora
Adora sus secretos, vive sin libretos
Sus héroes no tienen monumentos
Cocina, la odia
Sorda con los gritos de la moda
Trova y bosanova en las bocinas de su alcoba
Tiene pocas fotos, un par de recuerdos
Sus familiares dicen estar muertos
Sabe de soledad, se llama Estrella
Y hoy, cualquiera moriria por ella

Hay cariño, cariño, me quema
Hay cariño, corazón dolido
Hay cariño, cariño, cariño
(Canta "Corazón dolido")
Corazón, corazón, corazón, corazón, corazón, corazón
Hay me duele, me duele, me duele, hay me duele mi corazón
Hay me duele, me duele, me duele (hay me duele mi corazón)

Segura de sí misma
Carisma, coqueta
Practica natación, juega con raqueta
Camina poco, maneja un convertible
Un hombre sin dinero para ella es invisible
Primera clase en el avión
La bolsa y accesorios Louis Vuitton
Mantiene la figura con liposucción
Goza de las joyas con brillantes
Las fotos de los reporteros asfixiantes
Su amante es una decada más chico
Su esposo es rico de Puerto Rico
Trato pero sin hijos, bebe por despecho
De forma en silicón de cada pecho
Amigos influyentes
Mente adolescente, presume de solvente
Y actúa como serpiente
Humilla cuando puede y si no puede retrocede
Reina de belleza cuando tuvo 19
Hoy tiene cintuenta, vive una tormenta
El premio de una vida fraudulenta
Adicta a cafeína, se llama Carolina
En 4 meses tendrá una muerte repentina

Hay me muero, me muero, me muero (Hay me muero, me muero, me muero)
Hay me muero, me muero, me muero cansada de fingir
Hay me muero cansada de fingir, disfrazada de mentiras
Hay me muero por no tocar, por no tocar mi sueño
Hay me muero, me muero, me muero cansada de fingir
Hay me muero, me muero, me muero (por no tocar mi sueño)

15 primaveras, canto de sirena
Morena con olor a hierba buena
Espera serena por el camión cada mañana
Busca una moneda como premio de sus manos artesanas
Sueña cada noche, dibuja lo que ve
Tiene fe, vive para su bebé
Hace siete meses que dejo la escuela
No tuvo más tutela porque falleció la abuela
Su madre la maltrata, violenta
Su hija convertida en herramienta, sirvienta
Refugia su trizteza en cuentos
Talla con franqueza todos los remordimientos
No flaquea
La luna la levanta como a la marea
Escapa en la azotea
Y el viento seca cada lagrima en su cara
Ella se llama Sara y sería tan diferente si el amor la acompañara