Tú al Gulag y Yo a California

Mis J-Haybber de barrio contra tus Nikes,
las enchufo como Rimas Kurtinaitis,
se hizo el milagro por fin salió la estanquera,
tengo ojeras y un perro llamado Maiki,
manzanas y peras, dijo la beata,
post data, Ana Botella necesita un psiquiatra,
Pedro Jota a cuatro patas resultó excitante,
me bajé el vídeo y entre nosotros, me puso bastante,
cazadores de elefantes banqueros mangantes,
farlopa en bandeja de plata, la oposición en Venezuela es fascismo que saquen a los tanques, y los pisen como ratas,
es insultante, no eres del gueto chacho,
del gueto es Diego Cañamero y Marcelino Camacho,
solo creo en la personas ya no en siglas, entrar en el congreso rollo: quién es el dueño de esta pocilga?
si me necesitas silba dijo Bogart a Lauren Bacal,
jódete porque me salgo en cada línea,
lo siento no soy un buen ejemplo niña,
estoy con Toni de empalme en la rave del Viña, diferente orgullo friki, superviviente como la Teniente Riply,
el Ricky te funde hasta piripi,
lo sabe todo el mundo: el que le fió la coca a Pipi.
El que vuela sin tripi, el que tiene criterio,
el que sale de fiesta y empalma los pitis, pongámonos serios,

Ha vuelto el chico de tu clase, el que sienta al final.
Que toma apuntes con el lápiz y no con el Mac.
El que en el viña tiene hotel y prefiere acampar,
al que el Ministro de interior quiere enterrado en cal.
El chaval de los ojos azules. Impecable prestigio.
Son más vicios que virtudes, no lo dudes.
Estoy marcado por el odio.
Sólo un folio y tu mirada, chica, harán que me desnude.
Yo no bailo en clubes, estoy en la rave hasta el lunes.
Vomitando defectos, soñando despierto en mi nube.
Mientras tú dices defender la lucha.
Sí, claro, en comentarios del Youtube.
Otras dando la cara en huelgas, desahucios,
sin egos, sin sentir miedo ni un segundo.
¿Tú? Dando lecciones desde el ciberespacio.
Yo en la lista negra como Chaplin y Trumbo.
Y no me hundo, con ganas de cambiar el mundo.
Corazón nauseabundo y pintas de vagabundo.
Y todos juntos contra el fascismo latente,
en Ucrania presente y que no rían los mismos siempre.
Y siempre dando la cara, nada nos para.
Sin miedo a la bala, tampoco al que la dispara.
Y tu mirada es para el maniquí de Zara.
La mía pa' la joven con la cami de Thomas Sankara.
Y nada ni de cruces ni sotanas.
Os espero en el infierno con Hendrix y Frank Sinatra.
Con verano eternos e infinitas resacas.
Con llano de enfermo y risa hipocondriaca.
Viendo como el mundo entero arde,
como el rico es robado por el que pasa hambre.
Como suplica clemencia, como llora el cobarde.
Como al fin hay justicia y vuelve a sonreír mi madre.