Romeo Y Los Demás

Dónde estará el pescador,
el que me subió a la barca,
me arrancó la última flor
sin dejar apenas marca.

Dónde el profesor,
el que me puso en las manos
la horrible labor
de explicarme del piano.

Dónde estará el arquitecto,
el que contruyó mi casa,
aunque el plano era perfecto
nos faltó la argamasa.

Y dónde está papá
y su atroz resentimiento,
se lo llevó el mar,
o se lo llevó el viento.

Dónde está el de manos finas,
entre las que soy casi azúcar,
casi harina.

Dónde estará mi Romeo,
quiero hacer con él un trato:
si a las siete no se ha muerto,
a las ocho yo le mato.

Dónde mi bebé
y su mirada del Este.
Ay, ese está aquí,
esperando a que le acueste.

Dónde está el que es distinto.
Ayer le vi, como siempre di un petit respingo...

Todos me han tirado un besos.
Todos me han tirado un dardo.
Con unos me quité peso,
a los otros me los guardo.

A todos los amé,
con todos hubo algún castigo.
A unos los perdí,
a muerte a otros los sigo.