Sirenas

Comienza tu andar por ningún lugar con tu tripulación,
tu barco, y un arcón para llenar son, un montón,
los que han intentao cruzar este mar y no han regresao,
pero tu crees tener el don y es el único objetivo,
mientras estés vivo y en pié, traer contigo un millón,
como el doblón que acompaña tu suerte, pero el oro empaña el horizonte,
y baña la razón de un desazón que daña el corazón hasta la muerte,
y así un ser inerte, al que ya ni su reflejo en el espejo,
le recuerda así mismo al verse, aparenta calma encubierta más,
su alma recubierta de salitre, nervios vierte, no está de más,
amar al mar, más jamás temas que los demás te lo puedan robar,
sabes que hay agua y algas para todos, pero tesoros,
se encuentran depende lo que valgas solo, encadenaos esclavos,
gritan remen, al ritmo del timonel ya pocos pueden, dicen remen,
sin un soplo de aire para izar las velas, rodeaos solo de agua,
y no puedes ni ahogar tus penas, cuando un lema te hierve y tu vida das por él,
hay un problema tus ojos no ven si tus venas te hierven,
el tema es el germen, aunque no lo creen puede que se envermen,
su esencia se fermenta mientras duermen, la paciencia es lenta,
se tarda en perder, como la esperanza, pero esperando los nervios te alcanzan
y te hacen caer, la desilusión se contagia, eres el capitán,
de una tripulación que siente su desgracia, irradia rabia y la magia,
se convierte en zafia, tu cuerpo va a la deriva y tu mente vive en Babia,
ahora, dímelo tú MC, pillaste la metáfora,
que si le falta el amor a lo que haces te traga la ola.

Cuentan que reina en el mar, no se puede esquivar,
su cantar son, capaces de alcanzar tu paz,
perderás la libertad si no das, tiempo a la tempestad,
si no vives la verdad, cuentan que pueden raptar,
a tu mente irreptar, inyectar su nectar y tapar tu faz,
apartan sueños y voluntad, te harán su títere,
por interés, las viste o qué? Sirenas...

Pobre aquél que metió sus sueños en un cofre y que perdió la fé,
buscando en Londres sin saber ni el que, su sueño ha de ser,
agradecer, poder surcar el mar y sin buscar ningún lugar,
se hará dueño de algo más noble, ahora flotar como un leño de roble,
en un océano le mata, osea no es más que plata lo que le ata a la marea,
no, lelo, es como el escorpión que pinchó en su lomo y murió con su veneno,
de pleno, en contra de ti, todos aquí, dicen que no quieren seguir,
prefieren huir y vivir, ahora solos tú y tu navío sin otro alivio,
que la cruz del mapa que hoy marca el lugar de tu ataud, nubes que cierran el cielo,
te ciegan y no ves, te adentras en una tormenta será mejor que implores,
a ese Dios que se alimenta de lamentos en momentos duros de hombres,
casi muertos y aún recibe honores, llueve a cántaros, avanzas a bandazos,
pero, aún temes más a tus Demonios, espántalos, soy como el rayo,
que detrás lleva su trueno, paso sin fallo y luego sueno en tus sueños,
mientras vuelo, te zarandeas igual que un barco de papel en la bañera,
de un bebé que chapotea, verás... la naturaleza es bella y también cruel,
injusta, no se, quizás, venganza por el fuel, el temporal fue difícil de vencer,
ahora despiertas con tus ropas arapientas al amanecer, abres tus ojos y no puedes creer,
al ver que estás en las islas por las que darías tu piel, tu mente ya no siente,
sus penas, embriagadores cántigos provienen de aquel acantilao y te envenan,
justo antes de encallar y hundirte en el mar viste algo nadar, eran sirenas...

Cuentan que reina en el mar, no se puede esquivar,
su cantar son, capaces de alcanzar tu paz,
perderás la libertad si no das, tiempo a la tempestad,
si no vives la verdad, cuentan que pueden raptar,
a tu mente irreptar, inyectar su nectar y tapar tu faz,
apartan sueños y voluntad, te harán su títere,
por interés, las viste o qué? Sirenas...